Vivir la nevada del 8 de Marzo
Ya no voy a insistir más sobre el tiempo que ha hecho en lo que llevamos de invierno. Que dure lo que quiera y que nieve, llueva o haga el frío que le de la gana. Más divertido será contemplar cómo afecta a la fauna silvestre y al paisaje. Y a ello nos vamos a dedicar.
Los cultivos de la campiña instalada en las márgenes del río. Cultivos herbáceos....
... y de los cultivos leñosos, como melocotoneros, almendros, olivos y vides...
En el tramo de río que visité, había Cormoranes (una docena), 6 Garzas Reales, 4 Gallinetas de Agua, unas 20 Lavanderas Blancas, 0 Lavanderas Cascadeñas (1ª curiosidad), unos 70 Mosquiteros Comunes, una docena de Petirrojos, unos 6 Ruiseñores Bastardos, 4 Currucas Capirotadas, 1 Mito, Fresas de Nutria recientes sin avistamiento, 0 Martines Pescadores, 0 Patos Azulones, 0 Aves Estivales, unas 40 Tarabillas de los dos sexos, una veintena de Colirrojos Tizones, 2 docenas de Aviones Roqueros volando en bandos que acuchillaban la superficie de los remansos del río, varias incursiones de pequeños grupos de Buitres (4 por grupo), Cornejas graznando y teniendo algún altercado con algún Buitre.
¿Cómo podemos interpretar estos avistamientos puros y duros? Pues algo así como que cuando el Grajo vuela bajo hace un frío del carajo. Los ausentes, con seguridad, habrán ido a tramos más cálidos del río lejos de la cabecera. Los presentes en exceso (Garzas Reales, Petirrojos, Tarabillas, Colirrojos Tizones, Aviones Roqueros, Buitres y Cornejas), sencillamente han ido a la parte más térmica que tenían a mano sin alejarse mucho de casa. Por último están los sedentarios, ligados a ese tramo del río, que les da lo mismo que haga frío que calor: Cormoranes, Gallinetas de Agua, Lavanderas Blancas, Mosquiteros Comunes, Ruiseñores Bastardos, Currucas Capirotadas y Mitos.
Así que la composición de las Comunidades Faunísticas no es nada estable y depende de muchos factores, por ejemplo de irrupciones debido al frío. Podemos aventurar que la Comunidad de tal sitio en tal época del año será probable que esté constituida por tal y tal especie. Pero múltiples incidencias hacen que ésta, esté en continuo cambio adaptativo.
Mención especial para los invasores temporales, casi turistas, Petirrojos, Colirrojos Tizones, Tarabillas y Aviones Roqueros que con su colorido y actividad incansable, están alegrando estos días las estampas gélidas y blancas del Río Matarraña. Curiosamente, tres de estos turistas que buscan al térmico río, son Túrdidos (Petirrojo, Colirrojo, Tarabilla), así que un titular de un periódico tremendista podría rezar: ˝En estos días de tiempo gélido, nos invaden los turistas Túrdidos, venidos de lo alto de los Puertos˝.
El Petirrojo, muy individual, se dedica más a picotear en el suelo de las orillas herbosas. Los Colirrojos Tizones, son más descarados y corretean por las playas pedregosas o rocosas, picotendo. Las tarabillas gustan de los carrizos y tallos fuertes de herbáceas de la orilla para desde ahí, saltar a pescar insectos en la superficie del río, orillados. Los Aviones Roqueros, en manadas, van explotando de mosquitos y otros insectos voladores cada tarmo del río: los bandos se concentran un tiempo en un tramo de río, dan unas cuantas pasadas de caza (probablemente miles, el grupo actuando como una unidad) y, pasado un tiempo, se van a capturar alimento al siguiente tramo, más arriba o abajo, del río.
A todos estos animales no parece importarles los rigores del clima. Ellos se adaptan, se mueven, buscan nuevas fuentes de alimento y de confort térmico. No tienen tiempo para lamentarse. Tienen que sobrevivir, pues en breve empezarán a festejar para sacar adelante a sus crías y, eso amigos, para un animal silvestre, es sagrado.