El celo del Colirrojo Tizón (Phoenicurus ochruros)

A principios de marzo muchos Colirrojos Tizones abandonan la campiña arbolada y el soto, para subir a los Puertos de Beceite. Allí, en los páramos (pastizales muy pobres con erizones, enebros en forma de ciprés y abundantes pedregales), eligen un pequeño territorio para sus rituales de celo. Los machos evolucionan exhibiéndose, para que las hembras elijan al que prefieren. Las exhibiciones tienen lugar en el suelo, en un pequeño espacio de unos cuantos metros cuadrados, 

desde el que dan pequeños vuelos a atalayas cercanas 

(enebros, matorrales, masías abandonadas...).   

Comentarios

Entradas populares de este blog

Animales zapadores

Aterrizaje del Andarríos Grande (Tringa ochropus)

¿Porqué callan los pájaros?